El sábado, a mediodía, con puntualidad suiza, el llamado ‘Coro Rinconín de Santa Ana’ ofreció en la capilla de Santa Ana un concierto titulado ‘IV Festival Mar de Villancicos’ del que formaron parte diecisiete canciones y una de regalo ante la insistente petición de un público entregado que completó el aforo de la ermita: Bancos, pasillos y escaleras a rebosar. De la coral formaban parte Néstor Díaz, que también ejercía como director, y siete mujeres. El joven Néstor, tal vez la persona más popular y valiosa del Llanes que está por venir, tomó el mando para dirigir con soltura y precisión, así como con criterios musicales muy claros en aspectos referentes a la fusión de las voces, buscando en todo momento el máximo equilibrio.
El aporte definitivo lo prestó el barquereño Jesús Fernández Fuentes, virtuoso técnico de sonido que manejó el teclado con precisión y exquisito gusto. Tal como viene haciendo desde hace 72 años, María José Menéndez, de modulada voz, recitó el poema navideño titulado ‘Manolón’. En momentos puntuales actuaron como voz solista Emilia Pantiga, Néstor Díaz, la guerrera Charo Díaz Darrosa y una moza de la que solo recuerdo que se llamaba Conchita.
Voy a detallar el programa por el orden de aparición de las canciones: ‘La marimorena’, ’25 de diciembre’, ‘El chirriquitín’, ‘El portalín de piedra’, ‘Canta, bebe ríe’, ‘Me he comprado una zambomba», ‘Los tres Reyes Magos’, ‘Dime Niño de quién eres’, ‘Hacia Belén va una burra’, ‘Los campanilleros’, ‘Tan tan’, ‘A la salida de Llanes’, ‘Marinero, marinero’, ‘El tamborilero’, ‘Ya vienen los Reyes Magos’, ‘Cielito lindo’, ‘El burrito sabanero’ y ‘Pescadores’.
El concierto estaba patrocinado por la Cofradía de Pescadores Santa Ana, de Llanes, entidad de la que es patrón mayor Ángel Batalla. Al pie del cañón, en labores de organización y protocolo, allí estaban Maiche Perela y Pepín del Rosal. Aunque había muchas cámaras pendientes de cualquier detalle, el fotógrafo oficial de la muestra fue Valentín Orejas.
Dado el estado de emoción del público y la seriedad del evento, desde mi asiento deje volar la mente y llegué a considerar que estábamos viviendo un espectáculo digno de Nueva York, Viena, Sidney, Londres, Manaos, Paris, Ciudad del Cabo o el mejor Buenos Aires.
Escuché decir que el año que viene regresan las chicas y el chico del coro. Estar atentos. Hasta entonces, saludos cordiales.
