Hace 80 años, los días 15 y 16 de febrero de 1941, tuvo lugar el vendaval más violento sufrido por la península ibérica en todo el siglo XX.
Los meteorólogos lo describen como ciclogénesis a sotavento, en la que los vientos del sur, que se dirigían hacia un borrasca sobre Galicia, multiplicaron su velocidad al pasar por la cordillera Cantábrica.
Aquel vendaval épico, con rachas que superaron los 200 kilómetros por hora y que crecía hasta casi ser un huracán, dio a la mar un aspecto imponente y fue causando destrozos a su paso.
Hizo que Santander ardiera, se cuenta que el resplandor del incendio se veía desde el Paseo de San Pedro.
En Llanes, abatió árboles, causó daños en los tejados y se llevó por delante el bosque de encinas de “Los Altares”.
También, tiró el campanario de la iglesia de Santa María de la Villa y del Concejo.
Imagen, “El Oriente de Asturias”
0 comentarios