En Llanes, existieron sastrerías de primer orden, traemos hoy la que podría haber sido la primera: la “Moderna Sastrería Sobrado”. Fundada en 1838, según recogía su publicidad, estaba sita en el número uno de la Plaza Mayor, después Parres Sobrino, donde hoy se encuentra “Aramburu”.
Este negocio, que se distinguía por su buena pañería y que se anunciaba: “Para que puedan llevarse trajes y abrigos los que regresan a México”, competía con las sastrerías de las mejores capitales y presumía de recibir mensualmente figurines de Nueva York.
Se desconoce quienes fueron los titulares de la primera sastrería Sobrado, pero si sabemos que José Rodríguez Sobrado, seguramente descendiente de aquellos, continúo con dicho negocio en el bonito edificio de dos plantas, también destinado a vivienda.
Escribió Cayetano Rubín de Celis que esa casa fue incendiada por los franceses y que José Rodríguez Sobrado rehabilitó, en los años 60 del siglo XIX, el edificio que conocemos en la actualidad. También, recogen otros autores que el Sr. Rodríguez Sobrado había llegado a la villa en 1848, procedente de Avilés, para vender calderos de cobre.
El Sr. Rodríguez Sobrado contrajo matrimonio con Josefina Pérez Pérez y tuvieron cinco hijos: Eduardo, Ángel, Luciano, Purificación y Angelina.
Su actividad no se limitó a sastrería, ya que vendía todo tipo de textiles, que incluían mantones, pañuelos de seda, velos, puntillas, pasamanería, además de velas y productos de ferretería.
A principios del siglo XX, se incorporó a esa razón social, que giraba bajo el nombre comercial de “Hijo Sucesor de Sobrado”, Modesto Estefanía Hurtado, el cual había nacido en Medina de Rioseco, Valladolid, y era persona muy trabajadora y de grandes iniciativas.
El Sr. Estefanía logró que prosperara este establecimiento, uno de los más populares y acreditados del Llanes de aquel tiempo, en el que se pasó a vender prácticamente de todo.
Contrajo matrimonio con la hija del dueño Angelina Rodríguez Pérez, de cuyo matrimonio, según “El Oriente de Asturias”, nacieron cinco hijos: Josefina, Modesto, Eduardo, Ángel y Rosita.
Modesto falleció el 21 de julio de 1934 y en su necrológica publicada por “El Oriente de Asturias” se recogía: “ Vivió rodeado del aprecio de todos, de la amistad de Llanes entero. Y ha muerto también rodeado del cariño de todos y del dolor del pueblo de Llanes”.
Le sucedieron sus hijos Eduardo y Rosita y su esposa Doña Angelina, que estuvo tras el mostrador hasta edad muy avanzada.
Fue lugar de interesantes tertulias, como en la que participaban, entre otros, Fernando Toriello, Tano Rubín, Emilio y Manolo Sobrino, José Luis Mijares y Plácido Pedregal.
Fuente “El Oriente de Asturias” y Museo del Pueblo de Asturias
Imágenes, “El Oriente de Asturias” y Valentín Orejas
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