Una de las primeras acciones que realizó la Sociedad de Salvamento de Náufragos fue la de gestionar la voladura del bajo conocido con el nombre de La Osa, que se hallaba a la entrada del puerto. A tal efecto entraron en negociaciones con un buzo de Arriondas, pero no llegaron a un acuerdo.
En la sesión del 14 de agosto de 1887, el presidente leyó una proposición suscrita por don Gregorio Cué, en la que se obligaba a rebajar la roca en seis pies por el precio de 500 pesetas, poniendo él los materiales y utensilios necesarios.
No sabemos por qué no acepto la Junta la propuesta del Sr. Cué, ya que de ellos había partido la iniciativa.
Maiche Perela Beaumont
Imagen, Valentín Orejas
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